lunes, 11 de mayo de 2009

martes, 24 de febrero de 2009

Castilla y Aragón




Los reinos de Castilla y Aragón en la época de Jaime I


esto es el territorio español desde que comienza la reconquista hasta que acaba

jueves, 29 de enero de 2009

Maimonides (Moshe ben Maymon)

Maimónides fue el médico, rabino y teólogo judío más célebre de la Edad Media. Tuvo una enorme importancia, como filósofo y religioso en el pensamiento medieval.



Sobre sus conocimientos en medicina escribió un buen número de tratados.Sus obra.

Estas obras tuvieron mucha fama y le otorgaron numerosos discípulos. También es autor de obras filosóficas de gran peso en el pensamiento medieval, escritas durante los últimos años de su vida, como el Tratado sobre la resurrección de los muertos (1191).
La guía de perplejos (1190), mal apodada Guía de los descarriados, es la clave de su pensamiento filosófico y ejerció una fuerte influencia en círculos tanto judíos como cristianos y sobre todo escolásticos.s mayores de tema rabínico (talmúdico) son dos: un comentario en árabe de la Mishná, El Luminar (1168), también titulado Libro de la elucidación, y la Segunda ley o Repetición de la ley del año 1180, que constituye su obra magna y consiste en una amplia y minuciosa recopilación por materias de todas las leyes y normas religiosas y jurídicas de la vida judía (es decir, del Talmud).


Nació en la capital de Al-Andalus, es decir, en Córdoba, el 30 de marzo de 1135, en el seno de una distinguida familia de jueces rabínicos, estudiosos y dirigentes comunitarios, documentada desde el siglo X y que pretendía descender del Rabí Yehudá ha-Nasí, de la (segunda mitad del siglo II), redactor de la Mishná. Su familia materna, por el contrario, era de humilde condición; su madre era la hija de un carnicero que murió al darle a luz, y su padre se volvió a casar. Era este un erudito formado en Lucena por Rabí Yosef ha-Leví ibn Migas. Inició ya de pequeño sus estudios bíblicos y talmúdicos en la ciudad de Córdoba, pero en 1148 una ola de fanatismo almohade hizo que su familia tuviera que aparentar su conversión al Islam y cambiar a menudo de residencia por la España musulmana. Vivió en la ciudad de Almería, donde dio cobijo en su casa a su maestro Averroes, hasta trasladarse en 1160 con sus hijos a Fez. Allí residió durante sólo cinco años, debido a la intolerancia almohade que les obligó a exiliarse, primero durante unos meses, en Palestina y finalmente en Egipto. Maimónides residió allí el resto de su vida junto a su familia, en la ciudad de Alejandría y después en Fustat (hoy El Cairo), ganándose la vida ejerciendo la medicina en la corte del visir Saladino y luego, en la del visir al-Fadl, hijo mayor de Saladino. Con este oficio obtuvo una gran fama y admiración popular. En 1177 fue nombrado dirigente de la comunidad judía de Egipto. Murió en Al-Fustat el 13 de diciembre de 1204. Tumba de Maimonides

lunes, 26 de enero de 2009

mi nombre en arabe

carlos gugel saez
كارلوس غوخيل سايس
karlus gukhil sais

lunes, 12 de enero de 2009

Aportaciones del Islam a las Ciencias

LITERATURA

Probablemente uno de los logros más notables de la mente musulmana fue su contribución al pensamiento filosófico. En comparación, la influencia sobre la literatura fue menos espectacular. Sin embargo, en una cierta esfera desempeñó un papel decisivo.

Hay que considerar el naciminto de la poesía lírica moderna en Europa; esto se puede fijar con bastante precisión con respecto al tiempo y al lugar. Apareciendo casi simultaneamente en España y Francia, a principios del siglo XII, luego se extendió a Italia y al resto de Europa. Los romances españoles y las trovas provenzales son sus primeras formas de expresión. El renacimiento de la literatura en los paises de Languedoc supera los limites de la historia literaria. Marca el punto decisivo en la civilización del occidente.
“Sería imposible exagerar el valor creativo e inspirado de la poesía provenzal, tanto en el mundo del sentimiento como en el de las artes”, es la poesía moderna, quizás más aún que la poesía latina. Sin ella, no hay ninguna explicación para la poesía italiana ni para la española, ni para los trovadores alemanes y, desde luego, mucho menos para la poesía cortesana del norte de Francia. Pero, ¿Qué es exactamente la canción de los trovadores?.

El trabajo de Julien y de Ramón Menéndez Pidal, y los estudios de R. Nycle, muestra sin duda alguna, que la poesía de los trovadores, con sus grandes cambios en el modo de pensar y de sentir de occidente deriva directamente de la poesía popular árabe-andaluza.

Las últimas investigaciones de la Nueva Escuela Española de Historia, han establecido entre la poesía lírica andaluza, cuyos primeros ejemplos aparecieron a finales del siglo IX, y la poesía lírica provenzal, unos paralelos tan claros y una analogía tan obvia, que es imposible explicarlas sin admitir la influencia decisiva de una sobre otra.

Esta forma de poesía apareció en Andalucia en el siglo IX, en el popular “Zerjel”. Esto representa uno de los más atractivos resultados de la fusión de dos civilizaciones, la árabe y el romance.

El notable trabajo de Asím Palacios sobre el origen musulman de la Divina Comedia, ha demostrado la influencia que ejerció sobre Dante el gran místico Muhy Addin Ibn Arabi, y el poeta ciego Abul Ala Al Maari. La novela filosófica de Ibn Tufayl “Hay Ibn Yakzan” ( El viviente, hijo del vigilante), traducida al latín por Edward Pococke el Joven, en 1671, y después a la mayoria de las lenguas europeas, inspiró a Daniel Defoe y le sirvió como modelo para su obra “Robinson Crusoe”.

Ibn Hazm, una de las mentes mas brillantes de la España musulmana ejercio una influencia constante sobre la literatura occidental. Fue un escritor muy prolífico, escribió varias fabulas, cuentos y apologías que, a partir del siglo XIII, se extendieron por toda Europa.

La obra “Don Quijote”, de Cervantes, esta profundamente imbuída del espíritu árabe. Se puede concluir diciendo como hace Philip Hitti que: “En general, la contribución árabe más valiosa a la literatura de Europa medieval fue su influencia sobre la forma, gracias a la cual la imaginación occidental pudo liberarse de las reglas impuestas por la tradición”.
Pero no se puede cerrar este capítulo sobre la literatura musulmana sin mencionar la poesía persa, que es su máximo oramento. Ciertamente no contribuye de una forma directa a la evolución del pensamiento occidental, ni al refinamiento de la sensibilidad occidental, pero por su maravilloso colorido, por su delicado lirísmo, suntuoso y sutíl al mismo tiempo, y por su gracia sobrena, se ha ganado la admiración del mundo entero.
Goethe, hablando con el canciller Von Mnelle, dijo una vez: “A lo largo de 5 siglos los persas tuvieron solamente 7 poetas que ellos consideraron como verdaderos maestros, pero incluso entre que aquellos que rechazaron, los había mejores que yo”.

Hafiz fue el primer poeta persa que consiguió verdadera fama en Europa. Fue el orientalista alemán Von Hammer-Purgstall quien tuvo el honor de introducir al maestro de los “ghazels” (poemas líricos) a los lectores occidentales. Su traducción de toda la colección de poemas de Hafiz apareció en el año 1812-1813.

La verdad es que, al principio, sólo trajo la atención de un limitado círculo de literatos. Pero fue completamente diferente cuando Goethe publicó su colección de poemas llamados “ West-Ostlicher Diwan”, en 1819.

La colección de poemas de Hafiz, fue traducida de manera parcial o en su totalidad a todas las lenguas europeas. Pero la fama de Hafiz, como la de todos los demás poetas de oriente y occidente fue superada por el renombre mundial de Omar Khayyam. El es verdaderamente, uno de los poetas más leídos en los dos hemisferios.

Existen por lo menos doce traducciones del “Rubayat” en francés, así como varias en inglés, alemán, ruso, italiano, español, danés, húngaro y turco.

Se puede hablar, con razón de un verdadero culto al poeta en los paises anglosajones. El club de Omar Khayyam se fundó en Londres en el año 1892 y dio origen a una multitud de instituciones similares.

ARQUITECTURA Y ARTES PLASTICAS

El florecimiento del arte musulmán es uno de los fenómenos más rápidos jamás vistos en la Historia.

Nació como resultado de la fusión de los estilos que encontraron los árabes a lo largo de su conquista de los países del Mediterráneo Oriental.

La fórmula de este nuevo arte fue modificada y enriquecida por los diversos pueblos que formaron parte de la comunidad islámica, según su talento nativo y las influencias externas a la que estaban sujetos.

De esta forma, los monumentos de El Cairo y Córdoba pueden ser confundidos con los de Samarkanda o los de Delhi. El sobrio balance de los planos y de los volúmenes y la moderación arquitectónica de los monumentos de Alepo y Damasco, son diferentes a la exuberante fantasía de los palacios de Granada y de Sevilla.

La inteligencia abstracta de los hombres del desierto encuentra su expresión en las líneas geométricas del arabesco. Los azulejos esmaltados y floreados de Ispahan reflejan los sueños poéticos del Irán.

Pero esta diversidad no impide la unidad.

El estilo musulmán sobresale de todos los demás. Esta unidad tiene su origen en la unión espiritual de la comunidad islámica y en la particular sensibilidad creada por las enseñanzas del Corán. Es la religión la que ha ayudado a dar al arte musulmán las fuertes características espiritualizadas y abstractas que veremos en él.

Esta influencia se ve especialmente en los conceptos arquitectónicos de los artistas musulmanes y en el diseño arabesco.

Las mezquitas, el arte sagrado de los musulmanes, nos atestiguan el carácter monumental y el esplendor ornamental del pasado arquitectónico del Islam.

La influencia que ejerció sobre la arquitectura de las iglesias y castillos medievales es algo indiscutible.

La España medieval aceptó plenamente la mayoría de las tradicones artísticas de Andalucía, que había estado bajo la directa ocupación de los árabes. La influencia sobre el arte italiano fue considerable, como resultado del asentamiento de los árabes en Sicilia. A Francia llegó por Septimanía. Las obras de Emile Male, una autoridad en esta materia, señala su importancia.

La influencia de la mezquita de Córdoba es evidente en Notre Dame de Puy: "No puede ser pura casualidad que se vea el arco de trébol en la Catedral de Puy junto con el arco multilobulado, el arco de herradura y el arco de piedra bicolor de la Mezquita de Córdoba. El origen oriental de todas estas formas está afirmado por los caracteres árabes que enmarcan la entrada. La fachada multicolor, el doble arco, que es tan característico de la Mezquita de Córdoba y las pechinas, nos recuerdan a Andalucía (A. Fikry: L'Art roman du Puy et les influences islamiques, París,1934).

Ya tuvimos ocasión de mencionar la influencia musulmana sobre las artes industriales. Es en las "artes menores"donde es mayor esta influencia. Los objetos de lujo hechos por los diestros artesanos del Islam deslumbraron los ojos de los occidentales. Muchos de estos objetos todavía se conservan en los tesoros reales o eclesiásticos.

Las copas y jarros tallados en cristal de roca y las cristalerías esmaltadas en colores brillantes, gozaron de especial popularidad, así como el repujado en cuero, armas, alfombras y tejidos, especialmente las sedas, siendo las más hermosas utilizadas en los vestidos reales y sacerdotales, tales como el manto llevado en la coronación de los emperadores del sacro germánico o la esplendida casulla que puede verse en el Museo de Artes Decorativas de París.

(El tejido llamado damasco toma su nombre de la ciudad de Siria de este mismo nombre: Damasco; la muselina debe su nombre a Mosul, balaquín viene de Bagdad; y el tafetán es un nombre persa).

La influencia musulmana no estuvo en vigor solamente en las artes industriales.

Vamos como F. Diez, en su erudita obra sobre el arte musulmándescribe la influencia que, segun él ejercio en Europa la escultura selyudices de personajes vivos, la gran importancia artística de este adorno turco-islámico, que incorporaba esculturas de personajes vivos en su difusión en el Norte de Europa.

La explicación de este estilo ornamental a finales de la Edad Media, tiene su origen en el desplazamiento de las rutas comerciales del mundo del Sur al Norte como resultado de las migraciones turcas y de su constante avance hacia el Oeste. Una de las rutas comerciales desde Asia Menor hacia el Norte, bordeando el Sur de los Urales o bien atravesándolos, después a través de Alemania Oriental y el mar Báltico llegaba hasta Inglaterra. Ciudades comerciale como Hamburgo, Lubeck, Riga y Novgorod, se fundaron durante la segunda mitad del siglo XII.

Las ciudades de Vladimir y Sudal, el Este de Moscú, superaron a Kiev en importancia.
Las fachadas de las iglesias en estas dos ciudades atestiguan todavía la gran influencia del estilo turco-islámico en Europa (F. Diez Kunst der islamichen volker, Berlín, 1915)

GEOGRAFIA E HISTORIA

Su pasión por viajar, dice Renan, es uno de los rasgos más brillantes del carácter árabe y uno de los que les ayudaron a poner su marca más profunda en la historia de la civilizacíon.

Hasta la época del gran ímpetu de la navegación española y portuguesa, en los siglos XV y XVI, ningún pueblo contribuyó tanto como los árabe a la amplia concepción del Universo y a dar al hombre una idea exacta del planeta donde vive, que es el requisito previo de todo progreso real" (Ernest Renan, Miscelánea de historia de viajes, París, 1878).

Ya en el siglo IX los comerciantes árabes, que fueron los primeros en explorar esas lejanas tierras, visitaron China, Africa y el Norte lejano, lo que ahora conocemos como U.R.S.S.

El relato del viaje de Soleiman escrito en el 851 y terminado en el 880 por Abu Zeyd, fue el primer trabajo que se piblicó sobre China. Masudi (Hassan Ali Al Masudi), cuyo gran mérito fue reconocido por el mundo científico a finales del siglo XVIII, viajó a mediados del siglo X a través del inmenso imperio de los califas, de un extremo a otro. Además, visitó Ceilán, Madagascar y Zanzíbar. En su famosa obra "Pastos dorados"describe la naturaleza de los países que vio, "sus montañas, sus océnos, sus dominios, sus dinastías, así como las creencias y costumbres de los habitantes".

Ibn Haykal Al Biruni, Idrissi e Ibn Batuta, son otros viajeros y eruditos autores de obreas geográficas inestimables, que hicieron accesible a Occidente horizontes sobre los cuales nunca se había soñado.

Idrissi, que nació en Ceuta en el año 1099 y que vivió en la Corte de Palermo, escribió un tratado sobre geografía para Roger II de Sicilia. "Durante trescientos cincuenta años, dice L.A. Sedillot, los cartógrafos europeos sólo copiaron este tratado con insignificantes variaciones".

Haremos una mención especial del Mapa de Tamerlan Mundi de Ulug Beg, el nieto de Tamerlan y autor de las famosas tablas astronómicas que llevan su nombre. Cuando lo dibujó, se basó, principalmente, en los escritos de Nasr De Dine Thusi y en las observaciones de Al Koshdj. Este último, por orden de Ulug Beg, realizó un viaje a China y comprobo la media de un grado del meridiano y el tamaño del mundo.

Hablando de las cartas marítimas que elaboraron los árabes, Sedillo describe que pertenecía a Malem Cana, moro del Gujerat, a quien llevó como guía a Melinda. Otra carta, dibujada por el árabe Omar, ayudó a Al-Burquerque cuando navegaba por el mar de Omán y el Golfo Pérsico.

En una carta escrita desde Haití y fechada en Octubre del año de 1498, Cristobal Colón nombra a Aventuez (Averroes), como uno de los autores que le condujo a adivinar la existencia del nuevo mundo (Navarrete: Colección de viajes y descubrimientos. Citado por Renan en: Averroes y el averroismo, Madrid A. Humboldot: 1925. “Historia del Descubrimiento del Nuevo Mundo").

El número de escritores musulmanes que nos han dejado obras históricas es muy grande.
En el diccionario histórico de Kätib Tcheleb, llamado "Hadja Khalifa", se puden encontrar varios centenares de nombres de historiadores famosos.

Los escritores históricos más antiguos se remoentan a la época de los Omeyas. Uno de los primeros escritores fue probablemente Abu Minag, citado por Masudi en su obra "Pastos Dorados". Murió en el año 130 de la Hégira (Año 747).

Verdaderamente la mayoria de los historiadores musulmanes no se dedicaron a construir esas amplias teorías que preocupaban cas vez más al pensamiento occidental, y que caracterizó a la ciencia histórica corriente. Más bien se consideraron como coleccionistas de información de archiveros para la posteridad. Se abstuvieron definirse a sí mismo como interpretes y jueces de hechos pasados.

Esta concepción de la historia difiere sin duda de la occidental. ¿ Pero es esto bueno o malo?. Es discutible. De todos modos, es admisible que el autor que cumple con su deber de transmitir las tradiciones legadas a él, sin comentarios ni criticas, muestra más sinceridad e imparcialidad que aquellos otros autores que nos presentan documentos que han sido censurados, corregidos o falsificados, según sus propias creencias.

Pero el decir esto, sería injusto acusar a los historiadores musuilmanes de tener una mente estrecha y falat de juicio crítico. Al contrario, ellos consiguieron una gran fama por su amplitud de visión y despertaron interés por aquellas cuestiones que la historia occidental durante mucho tiempo consideró como fuera de su campo.

Por esta causa, la historia literaria ocupa un muy inportante lugar en todos sus trabajos.
Es facil comprender que aquí solamente podemos citar como ejemplo a unos pocos de los más representativos en este sin fín de historiadores musulmanes.

FILOSOFIA

Habría mucho que decir si uno quisiera seguir, paso a paso, el priogreso del pensamiento musulmán en el campo de la filosofía. Aquí sólo podemos dar un perfil general de la obra de los pensadores musulmanes en cuanto a la influencia que ejerció sobre la evolución de las ideas filosóficas de occidiente.

La especulación filosófica comenzó muy temprano en el mundo del Islam. Hubo un tiempo en que unos escritores tendenciosos se agruparon para negar completamente la filosofía musulmana. Afirmaban que cualquier doctrina en desacuerdo con el contenido del Corán o que proyectase alguna duda sobre sus principios religiosos no hubiera tenido ninguna oportunidad de desarrollarse en el ambiente intolerante del Islam.

Hasta no hace mucho tiempo, los textos históricos todavía enseñaban a los escolares que cuando los árabes conquistaron Egipto, el Califa Omar mandó destruir la famosa biblioteca de Alejandría porque: "Si los libros que hay dentro están deacuerdo con la filosofía islámica, son inútiles; si la contradicen son perjudiciales".

Nadie que posea el más mínimo conocimiento sobre la materia presta atención a tales afirmaciones, frente a las que se levantan amplias pruebas de lo contrario.

No sería ni justo, ni cierto, relegar el pensamiento musulmán al papel de un humilde asistente de la filosofía griega. La especulación filosófica árabe data del primer siglo de la era musulmana y aparece primero en relación con la teodisea del Islám.

Con la expansión y la asimilación de las obras de la anitguedad, el pensamiento musulmán se hace más complejo y más sutil.

En el tercer siglo de la Hégira, bajo Al Kindy, fue fundada la Escuela musulmana de escolástica. Está estrechamente relacionada con la tradición helenística y en ella predominan las tendencias neoplatónicas. Varios escritores de esta Escuela se encargaron de la tarea de reconciliar a Platón y Aristoteles y de ponerles en la misma linea que la religión revelada. Los más ilustres de estos escritores son Al Farabi (el Avicena, a quien debemos un tratado de gran espiritualidad y nobles sentimientos titulado: La ciudad perfecta), Ibn Badja, Ibn Tufayl e Ibn Ruchd (Averroes).

Hoy en día nadie niega que la ecolástica cristiana tomó como base los escritos de estos árabes.

En filosofía, como en ciencia, el pensamiento musulmán fue un elabón indispensable entre el pensamiento de la antigua edad y la especulación moderna.

"Es un hecho muy claro que el Islam logró reconciliar el monoteísmo, que es la principal contribución del antiguo mundo semítico, con la filosofía griega, que era la contribución primaria del antiguo mundo indoeuropeo" (Jacques C. Riesler).

Desde luego, debemos recordar que en el mundo de la meditación filosófica, la escolástica forma solamente una parte del pensamiento musulmán, menos importante y ciertamente menos original que el movimiento de ideas producido por grupos teológicos.
En filosofía, como en ciencia, los pensadores musulmanes mostraron una curiosidad intelectual que abarcaba todo. Todos los problemas sobre las causas primarias que se presentaron a la mente del honbre, todas las formas de meditación filosófica que van del emprisísmo más positivo al misticismo más elevado, pasando por etspas inermedias de escepticísmo y racionalismo, encuentran su expresión en una multitud de escuelas filosóficas. Si nos paramos a examinar la escolásticas musulmana más detalladamente, es porque la influencia de sus principales representantes sobre la filosofía religioso y laica fue particularmente importante en la Europa de la Edad Media. Avicena y Averroes alcanzaron tal renombre en Occidente, que su fama superó en mucho la adquirida en Oriente, donde eran conocidos principalmente como médicos.

La importancia de Avicena, que es considerado por algunos como el punto culminante de la historia intelectual de la Edad Media, se basa en el carácter enciclopédico de su trabajo. Ya hemos hablado de su eminente posición en la historia de la medicina. Desempeño un papel no menos importante en la ciencia y la filosofía. Estableció un sistema científico que duró varios siglos. Como principal representante del escolasticismo formuló por completo esta filosofía y le dio toda su amplitud de miras.

La influencia de Avicena en el pensamiento filosófico occidental fue inmensa. "No hay ni una sola tesis de nuestros filósofos medievales que no examine sus relaciones con la filosofía de Avicena. Y cuando más profundamente se examina ésto, más claramente se ve que Avicena no fue sólo una fuente de la que todos bebieron libremente sino también una de las principales influencias formativas de sus pensamientos". (A.M. Goichon: La filosofía de Avicena y su influencia en la Europa medieval. Ediciones Adrien Maisonneau, París).

Alberto Magno la tomó como modelo, aunque luchó contra la filosofía árabe en general y Renan en su trabajo "Averroes y el averroismo", no dudó en afirmar que el maestro de Santo Tomás, que estaba muy influido por Averroes, no era un desconocido del pensamiento aviceno. El Papa Juan XXII, antes de subir al trono pontíficio, "enseñaba una teoría del conocimiento, en la que Avicena sustituía a Aristoteles".

Guillermo de Auvergne, Alejandro de Hales y muchos otros, aprendieron de la misma fuente. Averroes, cuyo nombre es una distorsión de Abdul Walid Mohammad Ibn Ruchd, tuvo aún más éxito en Occidente que el propio Avicena. Por sus comentarios sobre Aristóteles adquirió una fama inigualable para cualquier otro autor musulmán.

El Reverendo Padre Asín Palacios, que ha realizado profundos estudios sobre el averroismo teológico de Santo Tomás y que de ninguna manera clasifica a Averroes con los averroistas latinos, toma varios textos del filósofo cordobés y los compara con textos del "doctor angélico" (Miguel Asín Palacios: El averroismo teológico de Santo Tomás de Aquino, Huellas del Islam, Madrid, 1941).

En 1240, Guillermo Auvergne, entonces Obispo de París, mando que censuraran varias escrituras teñidas de arabismo. En 1269, Etianne Tempier, Obispo de PArís, confirmó esta sentencia. No obstante, esta censura no pudo aplastar el movimiento.

La filosofía árabe continuó desarrollándose. De hecho, Siger de Barabant, que está considerado como el fundador del movimiento que llamamos "averroismo latino"o "averroismo cristiano", estuvo enseñado en la Universidad de París entre los años 1266 y 1277.

En el año 1277 el Papa ordenó una nueva investigación cuyo resultado fue la prohibición de 219 escritos considerados subversivos.

Expulsado de la Universidad y obligado a comparecer ante la Santa Inquisición, Siger fue condenando a cadena perpetua. Pero a pesar de todas estas medidas, el averroismo continuó ganando terreno.

El movimiento de ideas efectuado por Averroes fue tan extenso y las críticas de su trabajo tan contradictorias, que es necesario un considerable esfuerzo para comprender la verdadera personalidad del filósofo. Hay frecuentemente una laguna entre el pensamiento original del comentador y las ideas que se le han atribuido. Debería hacerse una clara distinción entre ambas.

No podemos realizar tal tarea sucintamente. Esperamos que, sin embargo, quede claro que Averroes prevaleció sobre la filosofía Occidental durante varios siglos, que sus doctrinas incluso distorsionadas y disfrazadas, - tanto por los entusiasmados seguidores como por sus implacables oponentes -, revolucionaron el pensamiento de la élite intelectual de Europa y contribuyeron a la liberazión del pensamiento occidental de ciertos impedimentos limitativos.